Los árbitros involucrados en el incidente presentaron las denuncias correspondientes, aunque, afortunadamente, no resultaron lesionados.
El campeonato Barrial de Taco Pozo se transformó en una escena de violencia, cuando integrantes de una familia arremetieron brutalmente contra el árbitro y hasta intentaron enfrentar a la Policía.
Los árbitros involucrados en el incidente presentaron las denuncias correspondientes, aunque, afortunadamente, no resultaron lesionados.
Enojados con el árbitro, varios hinchas entraron atacarlo en medio de un campeonato barrial.
Fue en Taco Pozo, donde los implicados hasta quisieron medirse contra la Policía. Varios fueron demorados.
Un grupo de hombres quiso agredir a los árbitros y un efectivo policial presente pidió refuerzos. Los detenidos serían todos de la misma familia.
El lamentable episodio –no es el primero que se produce, ya hubo otros en cotejos de la Liga Chaqueña- tuvo lugar en la tarde de este sábado 2 de noviembre, y el altercado fue durante un torneo juvenil en la cancha del Club Social y Deportivo Taco Pozo, donde se desarrollaba un campeonato barrial.
Según informó la comisaría de Taco Pozo, el incidente ocurrió alrededor de las 19:45, cuando el Sargento Gómez, quien se encontraba en el lugar junto con cuatro efectivos brindando servicio adicional, solicitó refuerzos tras un conflicto que involucraba a varios asistentes.
El personal policial informó que un grupo de hombres intentó agredir físicamente a los árbitros del evento, generando un gran desorden en el lugar. Ante la situación, los efectivos presentes lograron identificar a los agresores, quienes, al ser advertidos, escaparon del lugar.
Tras una breve persecución, se detuvo a tres personas, todas del mismo apellido, quienes residen en el barrio Esperanza. Los detenidos fueron identificados como R.D.R, de 24 años; C.M.R, de 26 años y H.R.R, de 60 años.
Los tres sujetos fueron trasladados al nosocomio local y, posteriormente, quedaron alojados en la comisaría y la causa quedó en manos del Juzgado de Paz local. Afortunadamente, ningún árbitro resultó lesionado y presentaron las denuncias correspondientes.