El secretario general de la CGT Chaco, Isaías Alegre, expresó su preocupación por los índices de desocupación y la falta de medidas para reactivar el empleo en el país . Según un informe del Instituto de Pensamiento y Políticas Públicas (IPyPP), basado en la última Encuesta Permanente de Hogares (EPH) del Indec, hasta el tercer trimestre de 2024, uno de cada tres desocupados llevaba más de un año buscando trabajo sin éxito.
«El mercado laboral atraviesa una crisis profunda, agravada por la recesión que se inició en el último trimestre de 2023 y que se ha intensificado durante la gestión de Javier Milei», afirmó Alegre. En diálogo con LaVoz del Chaco aseguró: «Los choferes, por ejemplo, que antes conseguían empleo con relativa facilidad, hoy llevan seis o siete meses sin poder trabajar. Los números que difunde el gobierno son una mentira, porque en las calles se ve claramente que no hay trabajo».
Consultado sobre las razones que explican esta situación, Alegre no dudó en culpar a las políticas del actual gobierno: «Este gobierno está gobernando para los empresarios y los grandes capitales extranjeros, no para el pueblo. Dicen que vencieron a la inflación, pero la realidad es que el costo de vida sigue subiendo y hay una recesión fenomenal que golpea a los trabajadores».
Rechazo a la intervención en la obra social de UATRE
Alegre también se refirió a la intervención del gobierno en la obra social de la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (UATRE), medida que generó un fuerte repudio dentro del sindicalismo.
«Nosotros estamos en contra de cualquier injerencia del gobierno en los sindicatos. La historia demuestra que cada vez que un gobierno interviene en un gremio, lo primero que hace es saquear sus recursos, dejarlo asfixiado y luego abandonarlo. Esto ya pasó con Mauricio Macri, y ahora estamos viendo lo mismo», denunció Alegre.
Críticas a la privatización de empresas estatales
En relación con el anuncio del presidente Milei sobre la privatización del Banco Nación y otras empresas estatales, el sindicalista fue tajante:
«Es una parte más del saqueo que está llevando adelante este gobierno. Los grandes empresarios que financiaron la campaña de Milei quieren quedarse con los recursos del país. Están privatizando empresas que dan ganancias, como el Banco Nación, YPF y Aerolíneas Argentinas. Son inescrupulosos, solo buscan llenar sus arcas a costa del hambre del pueblo».
El escándalo de
las criptomonedas
Alegre también se refirió al escándalo que involucra al presidente con la promoción de criptomonedas de dudosa legalidad.
«El presidente desde que empezó a salir en televisión estuvo vinculado a estos esquemas fraudulentos. Ya lo vimos con Cositorto y otras monedas que promocionó. La justicia debería investigar seriamente este tema en lugar de esperar a que termine su mandato para actuar».
Las legislativas
del 11 de mayo
De cara a las próximas elecciones legislativas, Alegre consideró que la sociedad tiene la oportunidad de manifestarse en las urnas y modificar el equilibrio de fuerzas en el Congreso.
«Esperamos que la oposición se una, porque si está dividida, va a ser muy difícil frenar este modelo económico que solo trae miseria. Necesitamos una mayoría en el Congreso para impedir que sigan destruyendo el país».
El rol de la CGT
Finalmente, el referente sindical subrayó la importancia de implementar políticas que incentiven el empleo y la industria en la provincia. «Cuando Jorge Capitanich era gobernador, había un plan industrial que generaba empleo registrado. Nos reuníamos periódicamente con los ministros de Trabajo, Empleo e Industria para impulsar medidas concretas. Todo eso se desmanteló en nombre de la supuesta lucha contra la corrupción. Ahora, el gobierno radical intenta copiar algunas de esas políticas, pero sin éxito, porque no se puede generar trabajo solo con acomodos políticos».
En este sentido, Alegre también hizo referencia a los informes que indican la pérdida del poder adquisitivo de los trabajadores.
«Según el último análisis del ISEPSI, una familia necesita más de 900.000 pesos para no caer en la pobreza, y el Indec habla de un costo de vida superior al millón. La disminución del poder adquisitivo incide directamente en la calidad de vida y la alimentación de la gente. Es un problema que el gobierno no está dispuesto a solucionar», concluyó el dirigente sindical.
Alegre se refirió también al costo de vida en la región y cuestionó las cifras oficiales sobre la canasta básica. «No creo en la canasta que salió en el básico. Se dijo que en Chaco era de 893.000 pesos, pero no refleja la realidad de los trabajadores. Nosotros hablamos de una canasta para un empleado común, como somos nosotros, que está en torno a un millón y medio de pesos, aproximadamente, para poder vivir bien», sostuvo.
El impacto en el sector de camioneros
En relación con la situación de los camioneros, Alegre afirmó que, si bien el gremio ha logrado mantener estabilidad, la crisis económica también los afecta. «Nosotros estamos bastante bien en comparación con otros gremios. Somos un sindicato cooperativo, con Hugo y Pablo Moyano, que siempre nos han enseñado a mantener el diálogo con las empresas y las cámaras para evitar mayores problemas», explicó. Sin embargo, advirtió que se ha registrado una caída en los salarios debido a la menor cantidad de rutas recorridas. «Al haber menos viajes, los compañeros hacen menos kilómetros y, por ende, baja el salario. Pero dentro de todo, nos mantenemos a flote», agregó.
Un duro diagnóstico sobre el estado de las rutas
Consultado sobre la situación de la infraestructura vial en el país, Alegre fue tajante: «Las rutas son un desastre, cada vez están peor. No hay mantenimiento, hay pozos por todos lados. La verdad es que la red vial argentina está en condiciones pésimas».
El dirigente gremial apuntó contra la falta de inversión del Estado y criticó las políticas del actual gobierno en materia de infraestructura. «Desde que asumió este gobierno, no se ha realizado ningún tipo de obra en las rutas. Se habla de privatización, de concesionar los peajes, pero no se explica en qué se utilizará ese dinero. Hay un desinterés total por las necesidades reales de la población», denunció.
Para Alegre, la ausencia de políticas de inversión en infraestructura y la precarización del empleo forman parte de un mismo problema. «Es difícil hablar de crecimiento económico o de generación de empleo cuando no hay condiciones básicas para la producción y el transporte. Sin infraestructura adecuada, no hay desarrollo posible», concluyó.