Desde 2016, se consolidó en el arbitraje y destaca la evolución de las mujeres en la profesión
El arbitraje femenino ha ganado terreno en el fútbol chaqueño, y una de sus protagonistas es Fernanda Cussigh, quien desde hace ocho años ejerce como árbitra. Con esfuerzo y dedicación, superó prejuicios y se consolidó en una disciplina históricamente dominada por hombres.
«Arranqué el curso en 2016 y en 2017 comencé a dirigir. Fue un proceso de mucho esfuerzo, disciplina y constancia», relató Cussigh en una entrevista con N9 Central.
Su recorrido incluyó un curso provincial, el curso nacional en 2019 y, más recientemente, el Federal en 2023.
Cussigh explicó que el arbitraje requiere un entrenamiento riguroso. «Tenemos preparación física tres veces por semana con un profesor, además de entrenamiento en gimnasio y la carga de partidos los fines de semana», detalló.
También destacó la importancia del trabajo en equipo dentro del cuerpo arbitral: «Nos ponemos de acuerdo en la previa del partido, analizamos detalles como la terna y las camisetas de los equipos».
Respecto a la reacción de los jugadores al ver a una mujer en la cancha, admitió que hubo ciertos prejuicios iniciales, aunque la situación ha cambiado con el tiempo. «Al principio decían ‘Uh, ya vienen de nuevo’, pero hoy ya están acostumbrados a nosotras», afirmó.
El arbitraje femenino en la Liga Chaqueña ha crecido significativamente. «Antes, en los cursos ingresaban mayormente varones, pero hoy es más equitativo», señaló Cussigh. Recordó a Julia Fortini como una de las pioneras y resaltó que actualmente son alrededor de 30 mujeres en la liga.
Cuando se le preguntó si alguna vez se sintió subestimada por ser mujer, su respuesta fue clara: «No, nunca lo sentí. Agradezco el trato de futbolistas, cuerpos técnicos y dirigentes».
Cussigh animó a las jóvenes interesadas en el arbitraje a dar el paso sin miedo. «Que se animen, que lo prueben. Puede parecer un mundo de hombres, pero es un trabajo muy lindo, que exige disciplina y compromiso», expresó.
Finalmente, dedicó un agradecimiento especial a su madre: «Siempre está detrás mío apoyándome», concluyó.
