En cada acto eleccionario en el país, se despliega un sinfín de propuestas publicitarias para promover y visibilizar a los distintos candidatos, para ello los grupos de campañas utilizan toda la artillería al alcance de sus manos y billeteras.
Este año lleno de elecciones, la comunidad con paciencia asistió a todos los actos y observó varias cosas: una es la obscena cantidad de dinero destinada a las promociones publicitarias, otra es la poca información de los candidatos en cuanto a sus propuestas reales y verdaderas y también pudo verse que a comparación de años anteriores la campaña no fue tan agresiva ni sucia (en términos de promoción publicitaria).
Al punto que una consultora de Buenos Aires realizó un relevamieto en todo el país referido a la contaminación visual que provocan los candidatos políticos a la hora de las elecciones.
Resistencia fue una de las ciudades menos dañada por la campaña proselitista y sin dudas eso refleja el «éxito» de las campañas constantes de Ciudad Limpia desde 2004 a la fecha.
«Estamos gratamente sorprendidos con la actitud de los distintos partidos políticos y los candidatos en las ultimas elecciones ya que no se observaron enchastres ni la falta de respeto por los espacios públicos, edificios y frentes de edificios como en otras ocasiones», manifestaron desde la Fundación
Por otro lado, agregaron: «No sabemos a ciencia cierta si se dieron cuenta de lo agresivo que significan las pegatinas descontroladas, los peligrosos pasacalles y las pintadas murarias que no dicen absolutamente nada ni expresan los programas y propuestas de los postulantes o simplemente se convencieron que la mejor llegada a la gente es la visita personalizada a cada barrio, las redes sociales los medios de comunicación y los espacios habilitados para tal fin. Son mucho más efectivos y económicos».
MÁS ACCIONES Y MENOS BASURA
«Pretendemos que la nueva generación de dirigentes y candidatos sea más respetuosa de la comunidad a la que quieren representar y expresar sus propuestas en vez de ensuciar los pueblos y ciudades. Han virado las campañas por hacer o llevar adelante acciones positivas como limpiar o hacer mejoras en los barrios más descuidados, demostrar su capacidad de gestión y mostrar en modelo real como resolver los problemas de la gente, fundamentalmente en los que a limpieza y cuidado del medio ambiente se refiere, máxime que es un tema recurrente y postergado por las administraciones», manifestaron desde Ciudad Limpia.
En otro punto enumeraron tareas para las próximas elecciones: «Recolectar ropas para Asilos y Guarderías, Campaña de Leche y Alimentos nutritivos, Plantación de árboles, Ornamentación y jardinería de espacios públicos, Rescate de Edificios de carácter patrimonial e histórico, Señalética para calles y nomenclaturas de calles y avenidas, Restauración de esculturas y monumentos y otros tantos donde se aprecie la verdadera vocación por defender los intereses de toda la sociedad con el menor costo posible y así de una buena vez, ganemos todos».
PROPUESTAS SÍ, MUGRE NO
Desde Ciudad Limpia manifestaron que permanentemente ciudadanos de distintos sectores de Resistencia solicitan a la ONG que insista con los candidatos a que no ensucien la ciudad en tiempos electorales, que explique correctamente y claramente sus propuestas para salir de este estado de pobreza y atraso permanente en nuestra sociedad y que abandonen metodologías de exponer «caras bonitas» solamente o frases gastadas y sin contenido, subestimando al electorado.
«También asusta la obscena cantidad de dinero dilapidada en las campañas políticas sin ver y observar la gran cantidad de necesidades que sufre la gente, y tampoco declarar los orígenes genuinos de los fondos erogados», concluyó el titular de Ciudad Limpia, Carlos Alabe.