Cada 13 de julio se conmemora el Día Internacional del Sarcoma, fecha que tiene como objetivo informar y concientizar sobre este tipo de tumor poco frecuente que afecta a 5 personas cada 100 mil al año.
Cada 13 de julio se conmemora el Día Internacional del Sarcoma, fecha que tiene como objetivo informar y concientizar sobre este tipo de tumor poco frecuente que afecta a 5 personas cada 100 mil al año. Asimismo, este representa menos del 1% de todos los cánceres.
Un sarcoma es un tipo de cáncer que se origina en tejidos como los huesos o los músculos. Aproximadamente el 80% de los sarcomas se encuentran en tejidos blandos y 20% en el hueso. Estos tumores son un grupo raro y heterogéneo y hay más de 150 tipos; sin embargo, el 60% de ellos se presentan en brazos o piernas, el 30% en tronco o abdomen y el 10% en cabeza o cuello. Tanto las personas mayores como los niños pueden desarrollar este tumor, aunque es importante resaltar que el sarcoma constituye tan solo el 1% de todos los tipos de cáncer que se presentan en adultos.
Los sarcomas de partes blandas son los que se encuentran en los músculos, grasa o tendones. La edad máxima de aparición en adultos está entre los 40 y 60 años y son ligeramente más frecuentes en hombres que en mujeres. Por otro lado, los sarcomas óseos que se encuentran en los huesos afectan sobre todo a niños y adolescentes, siendo hoy en día la quinta causa de cáncer en jóvenes entre 15 a 19 años.
Cabe destacar que el motivo de esta enfermedad, por lo general, es desconocido pero se puede vincular a síndromes de cáncer familiar. La mayoría de los casos no se pueden prevenir por lo que ante cualquier observación de algún tipo de bulto que crezca sin razón o síntoma, se recomienda consultar con el médico tratante.
Los síntomas iniciales de estos tumores son poco llamativos, específicos y con un índice de sospecha muy bajo. “Uno de los signos a tener en cuenta es el dolor asimétrico, solo en un brazo o pierna, y persistente. Asimismo, otra señal de alarma es la aparición de una nueva protuberancia (masa) o una que se encuentre en crecimiento en cualquier parte del cuerpo”, enfatizó el doctor Federico Esteso, (NM 108803) médico oncólogo del Instituto Alexander Fleming y Asesor del laboratorio argentino Varifarma.
Es importante remarcar que el tratamiento de estos tumores debe ser multidisciplinario, es decir, que sea un proceso llevado a cabo a través de un comité de expertos (cirujano, traumatólogo, radiólogo, anatomopatólogo, oncólogo médico, radioterapeuta y cirujano plástico), para decidir el plan diagnóstico y terapéutico más adecuado en cada caso.
Según la complejidad del avance de la enfermedad, se aplicará el tratamiento pertinente, algunos pacientes deberán realizar una intervención quirúrgica para extraer las células cancerosas, otros radioterapia, quimioterapia, tratamiento farmacológico o inmunoterapia.
Es preciso señalar que cada tipo de terapia dirigida actúa de forma diferente, aunque todas afectan la manera en que una célula cancerosa se divide, crece e interactúa. En efecto, los medicamentos de terapia dirigida atacan a partes de las células cancerosas que las diferencian de las células normales y sanas. “El pazopanib es el primer inhibidor de tirosin quinasa aprobado en este grupo de tumores. Este medicamento, ha demostrado utilidad en pacientes que hayan progresado a una primera línea de quimioterapia en todas sus variantes histológicas excepto las adipocíticas y los tumores del estroma gastrointestinal”, finalizó el médico oncólogo Federico Esteso.