El presidente de la Fundación Urunday, José Eidman, se refirió a la edición 2022 de la Bienal de Escultura y, a modo de balance, señaló: «Esto es una demostración de que cuando la voluntad de hacer nos une, entre todos se puede construir colectivamente una manifestación relevante en el plano escultórico internacional y es una experiencia de arte público única en el mundo».
Comentó que «el camino que dejó marcado Fabriciano es el de la excelencia y de hacer del arte un bien de todos», y añadió que «cuando las energías se ponen en las soluciones y no en los problemas se pueden lograr resultados como esta Bienal».
LA PALABRA DE
LOS CONCEJALES
El presidente del Concejo Municipal de Resistencia, Agustín Romero, remarcó que «en esta Bienal confluyeron en Resistencia las ganas de recuperación y de vivir la ciudad, y es una posibilidad de desarrollo que se debe aprovechar».
La concejala Katia Blanc consignó que «las vecinas y vecinos pudieron disfrutar de algo diferente con la Bienal, que es un ícono dentro de Resistencia, donde se encontraron culturas, arte y tradiciones. También se generó mucha actividad económica y el turismo fue un aporte esencial a los emprendimientos locales».
El edil Jorge Wozniczka manifestó que «la Bienal fue un evento maravilloso en el que las herramientas fueron la cultura y el arte que permitieron reunir las energías de un pueblo que necesitaba despertar de una situación difícil como fue la pandemia».
Por último, su colega de banca, Carla Cantero, consideró que «esta Bienal estuvo signada por la oportunidad que se les dio a los emprendedores luego de dos años de pandemia donde los problemas económicos golpearon a las familias».
PREMIACIONES
Además de los ganadores de la Bienal también fueron distinguidos Jhon Gogaberishvili, de Georgia; Genti Tavanxhiu, de Albania; Ihor Tkachivskyi, de Ucrania; Arijel Strukelj, de Eslovenia; y Juan Pablo Marturano, de la Argentina.
Asimismo, hubo una mención honorífica a los escultores invitados Alejandro Arce, Fabiana Larrea, Norma Siguelboim, Mónica Souza, Juan Sorrentino y Gerardo Suter. Se hizo lo propio con los jurados León Saavedra Geuer, de Bolivia; Todor Todorov, de Bulgaria; y Francisco Gazitua, de Chile.