La inflación que mide el índice de Precios al Consumidor, que realiza mensualmente el Indec, arrojó para julio su valor más alto en la comparación interanual de los últimos 30 años. El Nivel general del Índice aumentó 7,4% mensual en julio de 2022, y acumuló en los primeros siete meses del año una variación de 46,2%. En la comparación interanual registró un incremento de 71,0%.
En este sentido, la suba de Alimentos y bebidas no alcohólicas (6,0%) fue la de mayor incidencia en todas las regiones. Dentro de la división se destacó el aumento de Azúcar, dulces, chocolate, golosinas, etcétera; Aceites, grasas y manteca; Frutas; Verduras, tubérculos y legumbres; y Leche, productos lácteos y huevos
Mientras que según el Índice Barrial de Precios (IBP), que elabora mensualmente el Isepci, para el mismo período, arrojó en la provincia, que la sección de verdulería fue la que más sufrió la variación. Esto se vio reflejado en el aumento del 13,28%, esta pasó de un ticket promedio de $7.647 a $8.663, es decir $1.015,39 de diferencia.
Los productos de verdulería con mayor ajuste de precios fue la cebolla con el 100% de aumento, que pasó de $90 a $180. En segundo lugar, la acelga con el 33,33%, la cual alcanzó los $200 con respecto a los $150 de junio. La lechuga con el 25%, que llegó a valer $250 en comparación de los $200 del mes pasado al índice. El zapallo pasó de valer $120 a 145 el kilo, de junio a julio, un 14,5% más.
Mientras que los huevos por docena pasaron de valer $240 a $300, lo que representa un 25% de aumento. Mientras que la pera también tuvo un incremento del 25% al pasar de los $200 a los $250 el kilo, en tanto que la banana registró un poco más de 14% de aumento al elevarse de $175 a $200.
Las causas
Ante esto, desde la Cooperativa Frutihortícola, su titular Américo Barúa explicó que estos aumentos en el sector se deben a factores estacionarios y estimó que los precios de la cebolla y el zapallo «brasilero» continuarán «complicados» en el corto plazo.
«El 90% de los que se consume en la provincia se produce a más de 1.000 kilómetros de distancia», explicó. La recomendación es alternar o reemplazar a los productos que muestran incrementos importantes por otros similares: cuando se trata de zapallo, por ejemplo, optar por el «criollo» en lugar del «brasilero», aconsejó.
En declaraciones a Radio Provincia, el referente del sector detalló que «los precios se modifican, siempre, en función de cuatro o cinco variables entre los que se destacan los altos costos de la producción y del transporte».
«Esta es una provincia que importa el 90% de las frutas y verduras que consume», recordó.
La cooperativa abastece a buena parte de las verdulerías de Resistencia: «Mucha gente no sabe que la papa, la cebolla, la verdura de hoja y las hortalizas vienen de lugares muy alejados del Chaco», insistió.
No obstante, para Barúa, lo más grave ocurre «en épocas estacionales» con algunos de los productos que sufren saltos muy importantes en los precios, pero rescató que ni bien se normaliza el abastecimiento y las zona vuelven a producir en todo su potencial «los valores se acomodan».
«Hoy tenemos gravísimos problemas con la cebolla, y ahora apareció otro componente conflicto de alto consumo como es el zapallo brasilero, con aumentos muy altos y una proyección de desabastecimiento de unos dos meses», graficó.
El precio del kilo de esta verdura se ubica por encima de los $200, en buena parte de los comercios. No pasa lo mismo con el zapallo criollo, que continúa consiguiéndose a precios asequibles, pero su demanda es muy escasa.
En cuanto a la cebolla, producto de consumo masivo por excelencia y de los más demandados junto a la papa, atraviesa un momento «muy complicado» porque en el sur de Buenos Aires, donde se focaliza su producción, solo «están quedando las que son destinadas a la exportación», con lo cual su valor es muy elevado para el mercado local.
En un mes, podría comenzar a llegar cebolla producida en Santiago del Estero y esto «podría traer algún alivio» al precio en el mercado. En la cooperativa, la bolsa de 18 kilos de este producto se consigue por encima de los $3 mil.
La recomendación, por estos días críticos, es alternar o reemplazar a los productos que muestran estos incrementos tan importantes por otros similares: cuando se trata de zapallo, por ejemplo, optar por el «criollo» en lugar del «brasilero».