La compleja investigación por la desaparición de Loan Danilo Peña (5), el chiquito que fue visto por última vez el 13 de junio pasado, sumó un nuevo capítulo. Ayer se conocieron los resultados del peritaje a la camioneta del matrimonio María Victoria Caillava y Carlos Pérez, acusados de atropellar y matar al pequeño, en 9 de Julio.
Las pericias realizadas al vehículo de la ex funcionaria municipal y del capitán de navío retirado dio datos reveladores: encontraron un golpe en el chapón del paragolpes delantero, mientras que la prueba de luminol dio positivo en el neumático delantero derecho.
En la rueda, hallaron una sustancia roja, la cual ahora será sometida a análisis con el objetivo de determinar si se trata de manchas de sangre humana, sangre animal o algún tipo de material corrosivo. También, se conoció que hay pintura del paragolpes desprendida en el lugar en el que está la abolladura.
Ya en horas de la tarde, se supo que en el habitáculo de la unidad, los peritos también habrían encontrado pelos. Ubicados en la caja y en el asiento trasero, podría representar una pista clave para los investigadores, por lo que se espera que en las próximas horas estén los resultados del rastro cotejado con el ADN de los padres del nene.
Ante esa situación, la jueza de la causa, Cristina Pozzer Penzo, habría pedido pruebas complementarias luego de conocer el informe preliminar, a fin de cotejar si las manchas que se encontraron en el rodado son compatibles con la sangre de infante que ya lleva 19 días desaparecido.
ESCOLTADA
La Justicia ordenó custodia policial para Laudelina Peña, la tía del menor que cambió el rumbo de la investigación al declarar que todo se habría tratado de un choque seguido de muerte, protagonizado por la pareja Caillava-Pérez, ambos detenidos desde la semana pasada.
Esa medida fue dictada luego de que en horas de la noche del domingo, pasadas las 20, un grupo de vecinos descubrió la propiedad en la que se encontraba Laudelina, en inmediaciones de la calle Ricardo Gutiérrez al 2879, en la capital correntina.
Fue así que, entre insultos, gritos, una lluvia de piedras y otros elementos contundentes, además de gases lacrimógenos, efectivos policiales debieron montar un amplio dispositivo de seguridad para lograr trasladar a quien desde el sábado se transformó en una de las principales sospechosas.
«INVESTIGAMOS SI EL OBJETIVO ERA OTRO CHIQUITO»
Tal fue la bomba que soltó Laudelina que desconcertó a propios y ajenos en plena investigación para dar con el paradero del niño. Uno de los que salió al cruce en las últimas horas fue el mediático abogado, Fernando Burlando, defensor de la familia de la víctima.
Si bien no descartó hipótesis, Burlando cuestionó: «Hay personas detenidas, el delito que motiva y justifica su detención es la sospecha de haber participado en trata. A 18 días y estando presos, si esto fue un accidente y vas a estar preso toda tu vida, ¿no vas a declarar que fue un accidente?».
Asimismo, el reconocido letrado aseguró que «no hay ninguna prueba que indique un accidente» para seguidamente apuntar a los celulares requisados que serán parte de los peritajes: «De los celulares va a surgir algo».
Finalmente, comentó que pidió que Laudelina declare como testigo. «Quiero saber quién motivó su declaración. Si fue por ella, por un consejo. Queremos saber qué hizo llevarla a denunciar a Corrientes», y añadió: «Puede ser que haya sido aleccionada Laudelina. Puede ser una coartada para tratarle de bajarle decibeles a una futura imputación por delitos graves».
«OJALÁ SE QUIEBRE Y DIGA LA VERDAD»
Otro de los que habló del testimonio de Laudelina fue su propio hermano, José Peña, el papá de Loan, quien contó, además, que volvieron hacia la casa de Catalina para una nueva reconstrucción: «El abogado quería conocer la zona y fuimos para que vea todo».
Más tarde, el hombre deseó: «Ojalá que Laudelina se quiebre y diga la verdad. Todos queremos saber qué hicieron con él», para más tarde, durante otra entrevista televisiva, explicar que «seguramente la amenazaron».
En esa misma línea, María, la mamá de la víctima, también arremetió contra la mujer que en los últimos días pasó a ser clave en la investigación.
«Lo que dijo Laudelina es un verso, es mentira, porque mi marido estaba cuando salió la camioneta y no vio nada, tendría que haber visto cuando lo atropelló. Ella inventó todo», resaltó en contacto con la prensa nacional.
Hoy se cumplen 19 días desde la desaparición de Loan y la mujer no evitó el tema. Aun con pocas fuerzas, expresó que se encuentra a la espera de novedades sobre su hijo y que tiene la esperanza de que si alguien lo tiene, se lo devuelva.
«Estoy de pie, haciendo fuerzas. No tengo ninguna noticia de Loan, no se sabe nada. Quiero saber qué hicieron con mi hijo. Si alguien lo tiene, que me devuelva a mi hijo, o que me lo dejen en la puerta de mi casa, o que le dé a alguien. Estamos destrozados y ya pasaron 18 días (por ayer)», concluyó, compungida, la madre.
La Policía Federal irrumpió en la casa de Laudelina y secuestró un bolso
En horas de la tarde, se conoció que agentes de la Policía Federal irrumpieron en la vivienda en la que vive Laudelina, en 9 de Julio.
Un grupo de uniformados se presentaron en el domicilio y tras diligenciar una orden de allanamiento, se llevaron de la propiedad un bolso, el cual podría ser de interés para la investigación en curso.
De acuerdo a la información que trascendió, se conoció que la implicada podría estar nuevamente alojada en su casa de 9 de Julio, tras el casi linchamiento que sufrió durante la noche del domingo, cuando vecinos justicieros descubrieron el inmueble en el que estaba y debió ser trasladada por la Policía, bajo una lluvia de piedras, botellas y todo tipo de elementos contundentes.
En paralelo, en la vapital correntina y en múltiples puntos del territorio provincial, cientos de vecinos alzaron su voz para pedir por la aparición del niño.
Al canto de «Vivo lo llevaron, vivo lo queremos», se movilizaron también por el microcentro correntino, con destino a la Casa de Gobierno, primero, y luego hacia la residencia del gobernador (ver Contratapa).