En el mediodía de este jueves el juez Nelson Pelliza de la Cámara Segunda en lo Criminal, sentenció a la pena de prisión perpetua a los imputados Melisa Vallejos y su pareja Héctor Gómez, por el cruel asesinato de una beba de dos años, a la que le encontraron clavadas dos agujas en su cuerpo. La mujer tendrá prisión domiciliaria por haber sido madre hace poco más de un año.
De esta manera, la Cámara Segunda en lo Criminal de la Segunda Circunscripción Judicial, con asiento en la ciudad de Sáenz Peña, encontró culpables y condenó a prisión perpetua a la madre y el padrastro de la niña de dos años que murió con signos de estrangulamiento y dos agujas de coser clavadas dentro de su cuerpo en la localidad de Quitilipi.
Melisa Vallejos, que llegó al juicio en libertad, deberá cumplir la condena con prisión domiciliaria y fue retirada del lugar custodiada por la Policía. La Justicia la encontró culpable de los delitos de «homicidio agravado por el vínculo, ensañamiento y alevosía».