La Bienal Internacional de Escultura concluyó superando, como en cada edición, su récord de visitas, que según estimaciones se aproximan al millón de asistentes, consolidando este megaevento, legado de Fabriciano Gómez, promotor y alma máter, como un hito cultural, artístico y turístico de la región.
Además del impacto económico que significa para la región, 10 nuevas obras se sumarán a las casi 700 esculturas que posee la ciudad, emplazadas a lo largo de 36 años en sus veredas, bulevares y parques, un aporte invaluable al patrimonio de la ciudad.
Si bien el eje central es el concurso internacional de escultores a cielo abierto, en el cual diez artistas de la Argentina, Chile, España, Estados Unidos, Kosovo, Letonia, Nueva Zelanda, Perú, Rumanía y Turquía, trabajaron en metal durante siete días esculpiendo a la vista y en contacto con el público, más de una decena de actividades culturales se desarrollaron en simultáneo en más de 9 hectáreas.
El Concurso de Escultura para Estudiantes de Arte Premio Desafío Hierros Líder; Encuentro de Maestros Artesanos Argentinos; Encuentro de Artesanos de Pueblos Originarios; Festival Filarmónico Juvenil; Congreso Internacional de Artes y el Congreso Internacional de Derecho del Arte; Seminario de Arte, Derecho, Patrimonio y Urbanismo; Ciclo de talleres, conversatorios y conferencias; Exposición Escultores del Mundo; Exposición de la Asociación de Escultores Chaqueño; Exposición «Origen» de Escultura Contemporánea; Exposición del 33er Salón Internacional de Cerámica y Festival de Artes Escénicas, que conformaron este universo Bienal un «ecosistema virtuoso» de la industria cultural.
Evento único
Si hay algo que distingue a la Bienal de otras instancias competitivas es la posibilidad de que el público pueda presenciar el proceso creativo de cada concursante, que inició con una plancha de metal que aportó una mística especial de chispa y fuego.
Esa condición excepcional que permite seguir en tiempo real la secuencia que convierte un material inerte en una pieza de arte con significaciones específicas, es acaso uno de las singularidades que explican la afluencia cada vez más numerosa de familias que llegan de localidades cercanas, pero también distantes para disfrutar de la propuesta y emitir además su voto de su obra preferida.
El jurado conformado por los escultores Carlos Monge de México, Piotr Twardowski de Polonia y el escultor venezolano Ramón Morales Rossi, tuvo la difícil tarea de elegir tres, que recibieron premiaciones, de mecenas y sponsors entre diez obras: «Tiempo», «Escapar», «Mensaje», «Abstracto figurativo», «Simpleza», «Multiplicidad», «Habitus-antihabitus», «Obelisco», «Ritmo cósmico» y «Reflejo de la luna».
El Primer premio NBC fue para la obra «Tiempo» de Solveiga Vasiljeva de Letonia; el segundo premio Poder Legislativo del Chaco para el chileno Alejandro Mardones Guillén y su obra «Multiplicidad»; y el tercer premio «Osde» fue para la obra «Habitus-antihabitus» del español Carlos Iglesias Faura.
Pero además, el público, los niños y los demás escultores participantes pudieron elegir sus preferidas. El premio de los compañeros escultores «Efraín Boglietti» fue para «Tiempo» de la escultora Vasiljeva. Mientras que la elegida por la gente Juan Alberto García es de «Simpleza» de Luis Bernardi de la Argentina. El premio de las Infancias Reinaldo O. Martínez es del argentino Luis Bernardi con su escultura «Simpleza».
Asimismo durante la jornada final de ayer, aquellos artesanos aborígenes, integrantes del paseo de artistas y maestros artesanos argentinos fueron premiados y reconocidos en el auditorio del Domo.
En un Auditorio del Domo del Centenario colmado se entregaron premios, menciones y reconocimiento a la trayectoria a aquellos participantes que habitaron estos ocho días el Predio del Domo del Centenario para lo que fue esta gran Bienal Internacional de Escultura.
Agradecimientos
Desde la Fundación Urunday señalaron: «Este año cumplimos 36 años de fe, trabajo y voluntades compartidas. Y cuando hablamos de trabajo y voluntades, nos referimos a todos los colaboradores incondicionales que desde sus comienzos hacen posible esta Bienal del Chaco.
Es un privilegio contarlos entre nosotros. Gracias a todos los artistas de todas las disciplinas que participaron en esta manifestación que se ha convertido en marca del Chaco. Gracias a los participantes de la Bienal Internacional de Escultura y al Jurado por su trabajo arduo y responsable.
Las obras de estos grandes artistas del mundo quedarán emplazadas en la vía pública para el disfrute de nuestro pueblo y de todas las personas que nos visiten».
Y agradecieron además a los «mecenas y al Consejo provincial del Mecenazgo, pilares fundamentales de nuestra Bienal, que mediante la Ley Provincial de Fomento a las actividades culturales, hacen posible este proyecto y gracias infinitas a nuestros voluntarios y al pueblo del Chaco por brindar lo mejor de sí en cada edición de la Bienal».
circulo
virtuoso
Con un estimado histórico de unas 800 mil personas en 2022, y 600 mil en 2018, se calcula que esa cifra fue superada ampliamente en la edición. Habrá que esperar el resultado de las encuestas que la Fundación Urunday realiza según la ISO 9000 sobre los grupos de interés, para tener datos más precisos.
Tanto en la economía formal, como en la informal se ha genera un círculo virtuoso con una activación de la economía local muy importante. Así se materializa la visión y misión de Fabriciano de «hacer el arte un bien de todos, entendido en un principio como la democratización del arte, pero en realidad contiene un significado más profundo, al entender que el arte es un medio de elevación espiritual, como un poderoso agente de transformación», algo que se evidencia con la gran movida cultural que concentra la atención en el gran predio de la capital chaqueña.
Así el arte se transforma en el motor de la principal industria cultural y turística: diez días completos de hoteles llenos y turistas consumiendo claramente es la otra dimensión de la Bienal que está generada a partir del arte, no desde un evento deportivo, ni de unas vacaciones en la playa.
La Fundación Urunday nuevamente estuvo a la altura de la complejidad de un evento de estas características, una mega manifestación artística cultural y popular, donde está representada toda la realidad social de la provincia, desde el pequeño emprendedor o aquellos que están afuera de la economía.
Es la cuestión identitaria, un certamen internacional único en el mundo por la calidad de la organización, pero fundamentalmente, porque la gente se ha apropiado y es un actor protagónico, porque la obra que se produce va a parar al espacio público.
Las formas
del arte
Son muchas las formas del arte que se dejaron ver en el predio no solamente de los distintos escenarios, sino también de la calle y los paseos.
Desde el payaso que alegró a grandes y chicos, hasta la estatua viviente que se pasó horas maquillándose y que luego un buen tiempo en una determinada pose. Desde el artesano a quien se lo pudo ver trabajar detalladamente en su stand, hasta el herrero que trajo sus pesadas piezas para exponerlas.
Desde el panadero que elaboró su propio producto, hasta los salamines, quesos y aceitunas que viajaron quilómetros hasta llegar a Resistencia.
Los artesanos que moldearon su arcilla y la cocieron a orillas del río negro, los referentes de los pueblos originarios tejiendo el chaguar, los escultores invitados que moldeando el material que pensó para la ocasión: metal, hierro, madera, telgopor. Los músicos, bailarines, cantantes, que pisaron los escenarios para darse a conocer.
Todo lo que sucede hace que la bienal pareciera ser un organismo vivo, moviéndose, agitándose, trasladándose de un lado del predio hacia el otro. Este ser se encuentra en un estado permanente, ya que obras de arte continúan y permanecen en el tiempo, y en el espacio. Permanecen en la mente y se expanden en el público que recorre el predio desde el primer día que inició el chispazo y ahora es una llama.
Una mujer va box por box haciendo con el celular fotografías. Un padre explica a sus dos hijos algo sobre las esculturas; más allá, una abuela camina apoyada en su nieta y van deteniéndose ante cierta obra. Tres ejemplos que se multiplicaron hasta el infinito cuya síntesis exclama a los cuatro vientos que en Resistencia se cumple el lema de la Fundación Urunday: «Hacer del arte un bien de todos».
Por eso el público pudo elegir la escultura favorita votando, después de hacer su propio análisis el ejercicio que aguza la mirada, que va aportando datos, generando reflexiones, entrometiéndose en ese mundo que llamamos arte.
Dieciséis estatuas vivientes engalanaron la muestra
El predio de la Bienal se transformó en el escenario de una fábula. El proyecto de Estatuas Vivientes de estudiantes del ISFD en Artes 5074 de Reconquista (Santa Fe), se autofinanció el viaje para venir a compartir su acción artística de ensueño en el marco de la fiesta escultórica.
Son 15 estudiantes, más la directora y profesora Mariela Benítez. Las estatuas representan a animales autóctonos, con un ropaje barroco inspirado también en la flora regional.
Benítez comentó que, si bien para el viaje hubo un aporte de funcionarios de su ciudad, tanto el proyecto como la idea de participar en este evento es absolutamente autogestionado. «Pedimos autorización y nos permitieron estar hoy», comentó la docente.
Cada año, el grupo de más de 70 estatuas vivientes elijen una temática.
En la Bienal, presentaron «Frutos de la creación». Desde una idea integral de varias materias del instituto, este año trabajan el relieve sobre las ropas y máscaras.
La Unne mide el impacto económico y social en busca de información confiable para el desarrollo local
La Universidad Nacional del Nordeste (Unne) tiene a su cargo la medición del impacto económico y social de la Bienal Internacional de Escultura del Chaco en diversos aspectos sociales y económicos de la economía chaqueña, especialmente de la capital de esta provincia.
Desde la Facultad de Ciencias Económicas, junto a la Dirección de Información Estadística y Territorial del Chaco, se realiza este estudio que se hace por primera vez en las catorce ediciones de esta competencia internacional.
El crecimiento de este evento que se realiza cada dos años en la capital chaqueña, lo convirtió en un atractivo turístico para la ciudad, con derrame hacia el resto de la provincia y la región.
Por ello, desde la Fundación Urunday que lo organiza, encomendaron a la Unne esta tarea que aportará información relevante para la toma de decisiones y la definición de políticas públicas.
«Estamos viendo y viviendo la cantidad de personas que se acercan a este evento cultural que atraviesa no solo al sector de actividad de cultura o de turismo, sino que se entiende genera un efecto positivo, un efecto derrame, en otros sectores de actividad económica», dijo la decana de la Facultad de Ciencias Económicas de la Unne, Moira Carrió.
Desde el espacio Sinergia que la Unne habilitó en el predio bienal junto al Nuevo Banco del Chaco (NBC), explicó que en ese marco «se medirá por ejemplo el incremento en ventas de supermercados, comercios minoristas o mayoristas, por mencionar un sector de actividad económica indirectamente vinculado con esta actividad cultural».
El proceso implicó que se analicen datos de ediciones anteriores de esta competencia, a fin de «poder aislar algunas variables que pueden llegar a generar alguna especie de ruido en la medición», explicó la contadora y comentó que «costó un poco aislar algunas variables, por ejemplo pos-pandemia».
Se trabaja ahora en «terminar de filtrar estas variables para poder determinar concretamente estos porcentajes de incremento por ejemplo en la venta de supermercados minoristas, de emprendedores que están trabajando en el evento, etcétera».
Información confiable
Uno de los valores de la producción de conocimiento en la universidad, está relacionado a la posibilidad de aportar a espacios y actores con poder de decisión, herramientas confiables para la toma de decisiones y la generación de políticas públicas. Y en línea con la política de gestión del actual rector de la Unne, Omar Larroza, de trabajar en vinculación con gobiernos locales y sectores productivos en pos del desarrollo regional, el aporte de la Unne cobra aún más valor.
Así, este trabajo de medición de impacto económico y social de la Bienal del Chaco, «permitirá contar con estadísticas de base precisas, reales, concretas, para que a partir de allí se puedan generar modelos económicos que determinen o generen instrumentos de políticas económicas, de políticas públicas, para generar crecimiento económico», destacó la licenciada Carrió.
«Los resultados de la medición permitirán por ejemplo saber qué sector genera más efecto derrame o efecto multiplicador dentro de todas las actividades que se ven convulsionadas por la Bienal, y con esa información se podría avanzar con políticas públicas como por ejemplo subsidios para que en la próxima Bienal, ese sector de actividad económica genere mucho más efecto derrame, multiplicador, en la población, como ser mejoras en el mercado laboral», amplió.
«Poder determinar qué sector de actividad económica tiene más absorción de mano de obra para que en la próxima Bienal, ese sector pueda realmente satisfacer esa demanda de mano de obra local», agregó.
Convenio
El trabajo de medición se realiza a partir del convenio firmado en abril pasado entre la Facultad de Ciencias Económicas de la Unne, la Dirección de Información Estadística y Territorial del Chaco y la Fundación Urunday, organizadora de la Bienal.
El convenio específico firmado tiene por finalidad iniciar actividades de colaboración y apoyo recíproco para el diseño de una propuesta de captación, procesamiento, análisis e interpretación de datos, relativos a la realización de la Bienal Chaco 2024, con el fin de obtener información estadística que posibiliten una descripción sobre el impacto e influencia de la convocatoria artística sobre diversos aspectos sociales y económicos de los actores participantes y la economía chaqueña, especialmente de Resistencia.
Asesoría y actividades
A través de este acuerdo, Ciencias Económicas y la Dirección de Información Estadística se comprometieron a la asesoría en la ejecución de las siguientes actividades en relación estrecha con las actividades de la Fundación Urunday:
a) Sugerencias de diseño y validación de las metodologías de toma de datos muestrales y de estructuras de encuestas, relativas tanto sobre visitantes del evento como actores económicos involucrados.
b) Obtención y análisis de datos de fuentes secundarias, sobre entidades relacionadas al turismo y demás sectores afectados por el evento.
c) Procesamiento, codificación y análisis de datos de fuentes primarias (encuestas) y secundarias (datos administrativos).
d) Elaboración de informes de procedimientos y principales resultados y conclusiones obtenidas.
Recursos
humanos
La Facultad y la Dirección de Estadística se comprometieron a aportar los recursos humanos necesarios para el cumplimiento de las actividades comprometidas, garantizando su idoneidad y profesionalidad.
En tanto que la Dirección de Estadística se comprometió a brindar el apoyo necesario para conseguir la información censal e informativa que sea necesaria.