Los avances de la tecnología sin dudas aportan múltiples beneficios en la vida diaria, incluso en transacciones y movimientos de dinero, formas a la que se aggiornó también la delincuencia, como lo demuestran el creciente número de denuncias por estafas virtuales que se realizan en todo el país, y que de cierta forma suplantaron a las famosas salideras bancarias.
Son muchas, y cada vez más novedosas, las formas en las que los delincuentes captan a sus víctimas, y lejos de desarrollar sistemas de seguridad que no puedan ser vulnerados, se responsabiliza a los usuarios del cuidado en el uso de estos medios, mientras que compañías de telefonía e internet, como también los bancos deslindan sus responsabilidades.
«Para muestra basta un botón», dice el refrán popular, y Paula Ríos, contó a LA VOZ DEL CHACO su experiencia, por un lado para alertar a la sociedad y por otro lado para exponer mediáticamente la falta de respuestas de las empresas y compañías involucradas.
«Me hicieron una estafa con el Banco Hipotecario y me robaron casi $1 millón», comenzó comentando la joven. «Soy beneficiaria del Procrear, y en el tercer desembolso, me duplicaron el chip del teléfono, con el que accedieron al sistema de validación del banco, te mandan un mensaje con un código que se ingresa en el home banking y con eso se puede acceder», resumió.
Génesis de una estafa
Más adelante, Paula explicó que «el lunes 27 de diciembre, recibí llamados hasta las 10, estaba trabajando, pero seguí conectada con el WhatsApp Web, es decir que no manipulé el teléfono, hasta las 14 cuando salgo de trabajar y me doy cuenta que no tenía línea y que mi chip estaba muerto».
«Entonces me dirijo a Personal, preguntó qué pasó y me dijeron que había pedido un cambio de chip a la mañana, lo que claramente no había hecho porque estaba trabajando, sin embargo le figuraba un cambio de chip que no entiendo como realizaron, sino tenían mi DNI, mi nombre, nada», describió.
«Al otro día verifico mi home banking y me doy cuenta que me faltaban $945 mil, solo me quedaban $450 mil, entonces le me voy al banco, cuento lo que pasó, pido que me bloqueen la cuenta para que no me sigan robando y me dicen que tiene que hacer la denuncia, que hago de forma inmediata y la remitieron al área legal del banco, solicitando una respuesta. En estado de shock preguntaba si me iban a devolver la plata, y me dijeron que lo tenían que verificar», recordó.
A su vez comentó: «El mismo día que veo que mi cuenta se vació, voy a Personal y planteo la situación, y pido saber cómo, dónde y cuándo se hizo el primer cambio de chip y el sistema mostraba que mi chip lo entregaron en San Nicolás de los Arroyos, en Buenos Aires, a las 11.30 en una agencia de Personal».
«En enero vuelvo a ir al banco, hablo con el gerente que me dice que me quede tranquila, que el banco me va a devolver, y eso me dio una luz de esperanza. Pero después cuando vuelvo a los días, me atiende otro gerente, y me dice no, y me muestra el correo del área legal dónde decía que el banco no se hace responsable porque dice que es una estafa entre tercero», explicó.
Judicialización
Esta situación a Ríos no le dejó otra alternativa que recurrir a la Justicia: «Con la intervención de mis abogados, mandamos cartas documentos al banco y a Personal, también hicimos la denuncia en Justicia provincial y logramos que en el fuero federal, en la fiscalía de Patricio Sabadini, nos reciban la denuncia, si bien sabemos que la feria judicial se levantó hace muy pocos días todavía no tenemos ninguna novedad de eso».
«Pero confiamos en que la justicia federal o de la provincia actúen de alguna manera para que por lo menos contesten, porque Personal ni siquiera respondió la carta documento por lo que vamos perfilando una demanda, y al banco vamos a responder su negativa», dijo.
«No me contestaron, ni se comunicaron conmigo, así que la única manera que me queda, tampoco nada asegura que algo me van a reconocer, devolver o achicar la cuenta, de todo lo que me robaron», consideró.
entregadores internos
Al momento de buscar alguna explicación, para Paula existen entregadores internos: «Pensamos que hay alguien dentro del banco que tiene la data, porque el Procrear son tres desembolsos. El segundo desembolso me lo hicieron el 11 de noviembre, ese día a la siesta, me estuvieron mandando mensajes por WhatsApp, con un número con características de Buenos Aires, que decía que era del Banco Hipotecario, que mis datos iban a ser vulnerados y que necesitaba que le pase un código que me enviarían por mensaje de texto para resguardar mis datos.
Me llegaron esos mensajes de texto con el código, pero cuando veo todo eso me doy cuenta que es una estafa, que están dentro de mi home banking y quieren robarme la plata, así que no envíe nada e informé la situación al Banco Hipotecario, llamé al 0800 y el operador me reconoció que eso estaba pasando mucho», comentó.
Sin embargo, Ríos aseguró que no quisieron dejar asentado el reclamo. «Le pedí que me tome una denuncia o que haga mención de algo, a mí no me lograron hacer en ese momento, pero seguramente alguien va a caer porque es muy confuso», aseguró. «El operador me dio un montón de vueltas y me dijo que no me podía tomar la denuncia, que no podía dejar sentado de ninguna forma», agregó.
Esta situación refuerza su teoría por lo que reiteró: «Creemos que hay alguien en el banco que tira el dato, porque ellos sabían que yo tenía esa plata. Me depositaron el 22 de diciembre $1.200.000 que era la última entrega y a la semana me roban.
Alguien informa que se hace los desembolsos y vos tenés esa plata», y añadió: «En ese momento tenía mi cuenta sueldo del banco del Chaco con dinero como también en Mercado Pago, solamente ingresaron al Banco Hipotecario. No le importaba otra cosa».
«La persona esta sabía todos los aspectos, se hizo dos transferencias, una $500 mil y otra de $445 mil, y me dejaron $450 mil que es lo que no se puede extraer, porque el 30% de las transacciones se deben hacer con la tarjeta de débito en los locales de materiales de construcción, esta persona sabía todo el mecanismo que utiliza el Banco Hipotecario, sigo pensando que es alguien del banco», dijo.
«También creemos que dentro de personal hay alguien que entregó el chip, o sea de igual manera Personal entregó mis datos y vulneró mi privacidad entregando el chip, con y con eso podes acceder a todo. Con ej chip en el home banking se pueden pedir hasta prestamos», dimensionó.
Ríos continuó cuestionando la falta de resguardo de la empresa de telecomunicación: «Cómo entregan un chip en San Nicolás, si mi dirección es en Resistencia, y a la tarde, vuelvo a cambiar el chip. Entonces Personal tampoco tiene un seguimiento de sus clientes porque si entregaron un chip a más de 1.600 kilómetros y en tres horas vuelvo a pedir otro chip en Resistencia. No era yo obviamente».
Por último, la joven explicó: «Mi idea, es que se sepa para alertar a las personas que no le pase lo mismo, que la gente esté alerta y que sea mediático y que el Banco Hipotecario y Personal vea la mediatización de la noticia y respondan por lo menos».