La vicepresidenta se refirió a la causa judicial en las redes sociales.
La vicepresidenta publicó un video de 4 minutos y 4 segundos, en el que sostiene que los usuarios van a poder «conocer las nuevas y muy graves irregularidades de la no investigación» de la magistrada.
Insistió en que es «insostenible la continuidad de la jueza (María Eugenia) Capuchetti al frente de la investigación» que se sigue por el intento de asesinato que sufrió el pasado 1° de septiembre, y presentó en un video «las nuevas y muy graves irregularidades» de la funcionaria judicial en torno a la causa.
«En este video de 4 minutos 4 segundos, vas a conocer las nuevas y muy graves irregularidades de la no investigación de la jueza Capuchetti», escribió la Vicepresidenta en su cuenta de Twitter, donde publicó un video que recorre, con la voz en off de la periodista Julia Mengolini, detalles de la recusación que Fernández de Kirchner presentó contra la magistrada.
«El lunes Cristina recusó a la jueza Capuchetti en la causa que investiga el intento de asesinato. La investigación comenzó muy mal. A las pocas horas del atentado y bajo la custodia de Capuchetti, se destruyó y borró el contenido del celular de (Fernando) Sabag Montiel, el asesino que gatilló el arma a 15 centímetros de la cara de Cristina», comienza el material audiovisual publicado en la red social.
En el video que dura 4:04 minutos, la Vicepresidenta recuerda que «durante el gobierno de Mauricio Macri y antes de ser designada en el cargo, Capuchetti era una asidua visitante de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI)».
«En esos años la AFI estaba comandada por Gustavo Arribas y Silvia Majdalani, ambos actualmente procesados por espionaje al Instituto Patria, las oficinas de Cristina», señaló.
Y añadió que «como si esto fuera poco, se conoció a partir de la Comisión Bicameral de Inteligencia que la hermana de Capuchetti trabajó en el área de escuchas de la Dirección de Contrainteligencia durante el mismo período en que se desarrolló el espionaje ilegal».
Además, la recusación presentada por Fernández de Kirchner indicó «un hecho que siembra más sospechas aún: en los primeros días de la investigación, luego de una reunión entre jueces y camaristas de Comodoro Py, Capuchetti habría recibido indicaciones respecto de cómo debía tratar mediáticamente el caso y las posibles líneas de investigación».
«Después de ese encuentro, sus colegas le gestionaron una reunión con el editor general del Diario Clarín, Ricardo Roa, a la cual la jueza concurrió acompañada», detalla el video.
Y apunta: «Ricardo Roa, el editor en jefe que, a pocas horas del atentado, ya había inventado la teoría de la acción espontanea de un loquito suelto».
«¿Para qué eran necesarias esas instrucciones? ¿Alguien digita u opina por detrás de las autoridades judiciales el curso de la causa, su comunicación y las sucesivas filtraciones?», cuestiona el video publicado.
«En esos años la AFI estaba comandada por Gustavo Arribas y Silvia Majdalani, ambos actualmente procesados por espionaje al Instituto Patria, las oficinas de Cristina»
Durante el material audiovisual subido a Twitter, la Vicepresidenta también repasó otros hechos presentados previamente en la recusación a Capuchetti.
Al comienzo de la investigación, «durante días, la jueza demoró la detención de dos de sus cómplices ‘de Sabag Montiel’, Brenda Uliarte y Nicolás Carrizo. A eso se sumó la paralización de la causa ni bien aparecieron pruebas que vinculan a dirigentes de la oposición con el atentado», puntualizó.
Además, el video indicó que «Capuchetti rechazó los pedidos de allanamiento y secuestro del celular de Hernán Carrol», miembro de un grupo de extrema derecha, a quien Sabag Montiel, de puño y letra, indicó como ‘la persona que se haría cargo de su situación y de designar sus abogados».
«Carrol, el mismo que habría viajado al exterior con el jefe de gabinete de la Dirección de Inteligencia, a cargo del entonces secretario de Seguridad, Gerardo Milman», añadió, y señaló que «cuando lo citó a declarar, ya era tarde», porque «el día anterior, Carrol había borrado todo el contenido de su celular».
La Vicepresidenta hizo foco también en «la obsesión» del diputado nacional (PRO) Gerardo Milman «con la seguridad».
«El diputado Milman había presentado el 18 de agosto un proyecto en el que sospechosamente alertaba sobre un posible falso atentado contra Cristina», advirtió.
Y marcó: «Pero no fue el único. El 31 de agosto, un día antes del atentado, presentó un pedido de informes para conocer el funcionamiento de la custodia de la vicepresidenta y su familia, la cantidad de agentes y vehículos asignados en cada uno de sus domicilios».
«¿Para qué quería Milman tener acceso a esa información tan sensible sobre la seguridad de Cristina?», cuestionó y se contestó: «Aún no lo sabemos porque Capuchetti nunca lo investigó».
Asimismo, apuntó: «La jueza tampoco investigó una pista fundamental sobre la planificación del atentado. Durante el allanamiento del domicilio de Brenda Uliarte se encontró una nota manuscrita que refería a la regla Tueller. ¿Qué es la regla Tueller?»
«Es una doctrina de seguridad que calcula el tiempo que tiene una persona para sacar un arma y lograr dispararla sin que se la saquen. Se enseña a la fuerza de seguridad en Estados Unidos y fue traída como una novedad a la Argentina por Patricia Bullrich, cuando Gerardo Milman era su viceministro (de Seguridad)», explica.
«El diputado Milman había presentado el 18 de agosto un proyecto en el que sospechosamente alertaba sobre un posible falso atentado contra Cristina»
Y pregunta: «¿A Capuchetti le pareció normal que una persona como Brenda Uliarte tuviera en su casa una referencia a una técnica tan específica y sofisticada?».
«Al parecer sí y por eso la jueza nunca investigó quién escribió esa nota, los entrenó o capacitó», completó. Finalmente, el video subrayó: «Todos estos hechos detallados en la recusación son los que hacen insostenible la continuidad de la jueza Capuchetti al frente de la investigación».
La jueza rechazó la recusación en su contra presentada por la querella de Fernández de Kirchner.
La magistrada elevó el incidente a la sala I de la Cámara Federal porteña, para que decida si le corresponde seguir interviniendo en la causa.